3.1. Origen del web como integrador en Internet.
En el contexto del Ciberespacio y más concretamente en
el marco de Internet, vienen desarrollándose de forma progresiva
mejores sistemas de acceso y uso de la información. La
finalidad es obvia; acceder a la mayor y mejor información-comunicación
en el menor tiempo posible y en óptimas condiciones.
Los sistemas iniciales de Internet para acceder a los bancos de
información existentes eran de paso directo a la máquina
elegida para moverse posteriormente por los directorios deseados.
En estos casos se accedía mediante "telnet" al
uso ejecutivo, parcial o total de la máquina en cuestión.
Ésto conllevaba la dificultad de conocer la información
de dicha máquina si queríamos utilizarla. Esta comunicación
directa es la más pura pero la más compleja para
acceder a diferentes tipos de información a lo largo de
una red.
La evolución que facilitó el siguiente paso en el
acceso a la información vino con los protocolos de transferencia
de ficheros (FTP). Con dichas herramientas se disponía
de datos de acceso libre o restringido, ordenados y dispuestos
en directorios más o menos coherentes que facilitaban la
visión concreta de los contenidos almacenados. Estas unidades
estaban aisladas entre sí, no siendo visible su contenido
hasta "cargar" la totalidad del mismo.
La herramienta que supuso un salto cualitativo en la organización
y acceso a la información fue Gopher. Esta "utilidad"
permitía organizar todos los contenidos informativos de
Internet a través de los símiles de unas carpetas.
Estos directorios se organizaban por temas de forma jerárquica
y permitían a su vez, la relación con otras que
eran imágenes de las contenidas en otros "sitios"
.
De esta forma se generaban puentes
de acceso entre las distintas redes que conforman Internet, así
como entre sus contenidos.
Gopher supuso un gran salto en la gestión de la información
de Internet, además incluía un elemento nuevo y
era su combinación con herramientas "buscadoras"
de información para intentar acceso inmediatos a la que
fuese de interés.
Pero Gopher también tenía importantes problemas.
La búsqueda de una información a través de
los directorios jerárquicos podía ser una interminable
inmersión de decenas y decenas de carpetillas que podían
cruzar el mundo en su ubicación para encontrar finalmente
unos elementos informativos que podían no adecuarse claramente
al objeto buscado. Por otra parte las importantes limitaciones
de relación de los documentos informativos con otros de
su naturaleza, generaba muchos pasos para ir de unos a otros.
De alguna forma Gopher ayudó a ordenar la información
de Internet, pero seguía existiendo un importante problema
de acceso a la misma.
A través de todas estás herramientas y sistemas
de acceso a la información de Internet, se producía
un acceso "masivo". Era necesario acceder al bloque
completo de la información, independientemente del tamaño
de la misma. De esta forma se configuraban sistemas informativos
opacos ya que el acceso a los mismos se desarrollaba más
por abordaje que por interacción.
Si consideramos como subsistemas de Internet las aglomeraciones
temáticas o físicas en subredes telemáticas,
éstas serían muy cerradas, con poca intercomunicación.
Esta opacidad provoca una proliferación descoordinada de
contenidos y materiales, produciéndose replicaciones, ocultaciones
y en resumen incremento de la entropía y caos.
La idea del surgimiento del web supone otro paso cualitativo en
la organización de Internet. Ésta idea pasa por
encima de lo que es la ordenación física, externa,
de la información, para concentrarse en la ordenación
"interna" de la misma. De esta forma, el mecanismo fuerte
de organización de la información en el web es la
"asociación" de los contenidos informativos de
la misma en su propia naturaleza.
Esta cualidad supone un salto de las pautas de ordenación
lineales y jerárquicas para pasar a las asociativas y discursivas.
En cierto modo el mecanismo de relación entre los "sitios"
web imita al pensamiento humano, ya que es asociativo y se difunde
en complejas redes de enlaces que llevan de unos elementos a otros
relacionados. De alguna manera navegamos por la información
a través de la propia información. El contenido
se convierte en su propio medio difusor.
El "alma" del web es el hipertexto que con posterioridad
se ha derivado a hipermedia, al pasar de los elementos de enlace
textuales a objetos "informativos" en distintos formatos.
Estos objetos han adquirido su máxima potencialidad cuando
además han adquirido elementos que posibilitan la comunicación
directa entre usuarios.
La aparición del web en el Ciberespacio de Internet ha
supuesto la transformación de la superficie de los subsistemas
informativos. Éstos han cambiado su superficie opaca por
una superficie porosa y entremezclada. Los cambios cualitativos
que supone el web en el Ciberespacio inciden en la introducción
de elementos ordenadores de la información a un nivel más
alto que en el anterior, generando desarrollos en la posibilidad
de conocimiento con interesantes implicaciones.
Al hilo de esta idea podemos observar como en este caso los desarrollos
tecnológicos en programación para generar "mediadores"
en la circulación y estructuración de la información
tienden a desgajar el contenido informativo que se aloja en la
red para asimilarlo a la estructura interna de la propia información.
Se rompe de esta forma un desequilibrio entre los contenidos informativos
y su soporte. Podemos hacer un símil imaginando que al
principio la información en Internet iba en tren, todos
los viajeros, todos los bits iban pasando por todas las estaciones....ahora
los bits empiezan a ir en automóvil y casi todos van directamente
a su destino.
3.2. Generación
de la trama web.
Emilio Sáez Soro © 2000