3.4. Activación y navegación como elementos básicos de acción.
Como ya he mencionado, el sustento físico del Ciberespacio
se encuentra situado sobre una infraestructura de telecomunicaciones
y un innumerable conjunto de computadoras conectadas con su software
correspondiente. Ésto, en sí, por sí sólo
tiene poco o ningún interés para la sociología.
Es el uso que hace la sociedad de todo este utillaje el que genera
un espacio de interacción social, llamado Ciberespacio.
Es la activación de esta parafernalia la que genera marcos
peculiares de relación e intercambio en una comunidad que
se forma en este medio.
Es el actor que se "sumerge" en una escenografía
virtual de comunicación, el que activa los artefactos,
los marcos interactivos de relación. La escenografía
es la metáfora de la plaza pública, del teatro,
del teléfono, del dormitorio de nuestra casa, de cualquier
contexto dado al intercambio. La relación es real, activando
los marcos electrónicos, telemáticos, se establece
un vínculo social de indeterminadas consecuencias.
En este sentido entiendo lo virtual como elemento subsidiario
del Ciberespacio, como una muleta para simular mayor confort en
el intercambio; aditamentos del simulacro de un contacto material.
En el sistema web, la activación es en gran medida "navegación".
Navegar por el web es recorrer, digerir en ocasiones, un discurso
colectivo. La navegación se constituye en el elemento que
da coherencia y unifica las costuras formales del sistema web.
Podemos considerar una navegación activa, como construcción
de los caminos a través del establecimiento de los vínculos
externos de las páginas web. Se tienden puentes, se trazan
las rutas, los discursos a través del espeso cuerpo del
Ciberespacio. La otra navegación, la pasiva recorre los
discursos dibujados sobre la estela electrónica y asume
los fragmentos de los mismos que recorre y unifica en otros nuevos.
En este proceso el entendimiento queda difuminado porque las pretensiones
de validez sobre las que se apoya quedan confundidas. En el acto
de navegación por el web, el navegante asume un discurso
que es de todos los que construyen las páginas por las
que discurre, pero a la vez no es de ninguno de ellos, porque
en la navegación se ha construido un discurso nuevo con
elementos que en su combinación forman algo original y
diferente. Este discurso lo construye el navegante con los materiales
recogidos en el camino. El entendimiento se produce, pero de una
forma plurireflexiva ya que el discurso generado puede estar muy
lejos de las intenciones de los constructores iniciales de sus
partes primeras.
4. TIPOLOGÍAS.
LA BÚSQUEDA DE UN MÉTODO.
Emilio Sáez Soro © 2000